El gran arco que ahora vemos sobre el estanque corresponde a la antigua atarazana de época musulmana que había debajo del palacio de la Almudaina, y que se abría directamente al mar. Parece ser que el arco data del siglo XI. S'Hort del Rei fue un jardín medieval situado extramuros de la Almudaina que subsistió hasta el siglo XIX, cuando fue urbanizado. A principios del siglo XIV, en tiempo del rey Jaume II de Mallorca, tuvo una época de esplendor, y había plantados árboles frutales, flores y hortalizas. También se criaban en él algunos animales como, por ejemplo, conejos. En la década de 1960, dentro del plan de recuperación del entorno del palacio de la Almudaina, los edificios que había fueron derribados para hacer unos jardines nuevos de gusto historicista, proyectados por el arquitecto mallorquín Gabriel Alomar. Este arquitecto combinó elementos tradicionales del jardín mallorquín, como la pérgola, con otros de inspiración andalusí, como la alberca, con surtidores que recuerdan al Generalife. Debemos decir que este trazado nuevo poco tiene que ver con el jardín medieval. La actual avenida Antoni Maura coincide con la que fue la desembocadura del torrente de Sa Riera, que bajaba por la Rambla, calle Unión y Borne, y dividía Palma en "vila de dalt" o ciudad alta (lado de la catedral) y "vila de baix" o ciudad baja (lado de los barrios de Sant Jaume y de Santa Creu). Sa Riera era peligrosa a causa de las riadas. Es tristemente famosa la ocurrida en 1403, cuando murieron miles de personas. Fue desviada por razones urbanísticas en el año 1612, por fuera del recinto de las murallas, y su curso actual coincide con el paseo de Mallorca.
Es el mejor conservado de los castillos de montaña existentes en Mallorca. El Castillo de Santueri ha sido testigo y protagonista de numerosos episodios de la historia balear; también de leyendas, alimentadas por nombres tan ilustres como el Archiduque Luis Salvador. El Castillo de Santueri se encuentra a siete kilómetros de Felanitx, en un altiplano cuya cima alcanza los 475 metros de altura. Su estratégica ubicación le permite visualizar los núcleos de Portocolom, Portopetro, una amplia franja costera del Migjorn (el sur de Mallorca) y, en días claros, la silueta recortada de la isla de Cabrera.
Una de las excursiones más clásicas de Mallorca. Se puede subir a pie desde el pueblo o en coche hasta el Verger o hasta el Pouet, y se visitan las ruinas de la fortaleza en la que los leales al rey Jaume II Mallorca, Cabrit i Bassa, resistieron la invasión de Alfons II de Aragón. Alaró (Mallorca)
El yacimiento de Sa Canova, situado en la posesión del mismo nombre, a pocos metros de la carretera Artá - Colònia de St. Pere, es conocido principalmente por el monumentalismo del talayot que se conserva en él. Éste es conocido popularmente como sa Clova des Xot. Se trata de un talayot circular de hasta 5,5 m de altura y 16,2 m de diámetro, conservando 4,5 m la columna central. Estas características lo convierten en un de los más imponentes de la isla. La función de estas construcciones es muy variada y depende mucho de cada caso, pero principalmente eren elementos identitarios y de control territorial de una comunidad. En realidad este talayot formaba parte de un antiguo poblado talayótico, del cual aún se pueden observar restos de la muralla y de otras estructuras que podrían formar parte de habitaciones, de otros talayots, tanto circulares como cuadrados, y de un posible santuario. La fundación de estos poblados en la isla se sitúa entorno el año 1000 y el 800 aC.
Se cree que su origen es islámico aunque su desarrollo está vinculado a la época de la conquista de Mallorca por JaimeI en 1229. La torre se construyó para vigilar la costa y servir de refugio y defensa a los pobladores del fértil valle de Canyamel, frente a las frecuentes incursiones de corsarios e invasores. Durante sus más de 700 años de historia, la casa fortaleza ha experimentado numerosas alteraciones y, una vez desaparecido el peligro de invasiones, se transformó en una posesión dedicada a los trabajos del campo. Al introducirse el cultivo de la caña de azúcar, en la segunda mitad del siglo XV, la edificación defensiva cambió su nombre primitivo de Torre d'en Montsó por su denominación actual de Torre de Canyamel.
El recorrido comenzará en la Estación del Ferrocarril, ubicada en la Plaça d’Espanya, 6. El edificio que alberga la estación del tren de Sóller fue la antigua casa fortificada del siglo XVII, de Can Mayol. Sobre el arco de entrada de la fachada, se puede observar una cartela con la fecha de 1606. Posteriormente fue convertido en hotel y finalmente, a principios del siglo XX, en estación ferroviaria. El resultado de la remodelación de 1911-1912 es el lenguaje modernista que conserva el edificio, compuesto por un conjunto de delicados detalles decorativos en puertas, ventanas, herrajes, ménsulas del andén, o la cisterna del patio, entre otros. Saliendo de la estación, a la izquierda, junto al torrente Major, el viajero encontrará ante sí tres ejemplos de las típicas rejas que delimitan los jardines de numerosas casas de Sóller. Can Penya, Can Isabel y Cas Fideuer, son muestra del buen trabajo de la forja de los artesanos del primer tercio del siglo XX. Flores, florones y hojarascas se combinan en elegantes y sencillos diseños. En estos jardines crecen pinos, araucarias o árboles de pisos y palmeras.
La Plaza de toros de Palma de Mallorca, conocida popularmente como Coliseo balear, Coliseu Balear en catalán, es una plaza de toros de Palma de Mallorca. Está situada en la Calle Gaspar Bennassar (arquitecto que la diseñó) del barrio homónimo en el Distrito Norte de la ciudad. La plaza consta de 11.620 asientos en las gradas, 4 palcos (norte, sur, este y oeste) y mide 44,5 metros de diámetro. Es propiedad de la empresa Exclusivas Balañá S.A., con sede en Barcelona. Actualmente es conocida por sus usos deportivos y, sobre todo, por ser el lugar donde se realizan los conciertos estivales más multitudinarios de la isla. El Coliseo Balear forma parte del patrimonio histórico de la ciudad de Palma de Mallorca. Su época de mayor esplendor fueron las décadas de los 60 y los 70. Por ella han pasado toreros de gran renombre como Luis Miguel Dominguín, Santiago Martín "El Viti", Manuel Díaz "El Cordobés", Paquirri y Jesulín de Ubrique entre otros.
El teatro data del siglo XIX y que, tras una reforma de 6 años, presenta una nueva imagen: se ha reforzado la estructura del edificio, se ha renovado toda la infraestructura de servicios, accesos ' y se ha dotado al Teatre Principal de la más avanzada tecnología en materia de artes escénicas. El escenario, por ejemplo, ha crecido de 14 a 23 metros lo que permitirá hacer prácticamente cualquier tipo de espectáculo. Además, al tratarse de un edificio histórico, se ha intentado recuperar el Teatre Principal tal como era cuando se abrió en 1932. La sala grande ha vuelto a su estructura original, se ha eliminado el anfiteatro, se ha vuelto al sistema de lonjas, se ha recuperado la nombrada sala de tertulias y se han restaurado las pinturas del techo, obra de Felix Cagé.
Poblado Talayótico Ses Païses Artá Mallorca Si algo caracteriza la prehistoria de Mallorca y Menorca es la llamada cultura talayótica. Se considera que apareció hacia finales del segundo milenio antes de nuestra era, y perduró hasta la conquista de las islas por Roma, en el 123 ANE. Pero a pesar de la incursión romana, la sociedad balear continuó viviendo durante décadas en sus poblados talayóticos. En mitad de un bucólico encinar del término de Artà, al noreste de Mallorca, se encuentra el poblado de Ses Païsses. Además de turistas atrae a muchos estudiosos de la prehistoria mallorquina, dada su estructura típica perfecta. Una serie de construcciones rodean un talayote central de 4,5 metros de altura, y todo ello está rodeado por una muralla de planta elíptica de 374 metros de perímetro. Esta muralla, una de las mejor conservadas de la época en Mallorca, se cree que data del año 800 ANE. La componen losas impresionantes, ciclópeas, y un portal dintelado. Dentro del recinto se distinguen dos grupos de edificaciones. El primero, presidido por el talayot, consta de una serie de habitaciones y una sala con restos de tres columnas. El segundo lo conforman dos habitaciones de planta absidal. Estudios recientes hablan de una crisis hacia el año 500 ANE que alteró la vida en los poblados talayóticos de Mallorca y transformó su sociedad. Algunos restos localizados en Ses Païsses, como cerámica y objetos de hierro procedentes de otras civilizaciones mediterráneas, fueron seguramente introducidos por los honderos (foners), que por su destreza con la honda eran reclutados como guerreros por los cartagineses.
Junto al Ayuntamiento está el Consell de Mallorca, actual órgano de gobierno de la isla de Mallorca. El edificio tiene su origen en la antigua Diputación Provincial, una institución estatal de principios del siglo XIX que hizo construir este palacio con una notable fachada neogótica diseñada por el arquitecto Joaquín Pavía y Birmingham, en el año 1882. Los detalles escultóricos, muy interesantes, son obra del artista Llorenç Ferrer i Martí. En el interior destacan la escalera monumental y el salón de sesiones. En las distintas dependencias pueden verse notables pinturas de autores mallorquines. Esta calle debe su nombre al palacio real de la Almudaina, que se encuentra al final de la misma. Durante siglos, en su parte derecha estuvo el famoso convento de Santo Domingo, monumento gótico de primer orden. Demolido en el año 1837 como consecuencia de la ley de desamortización eclesiástica promovida por el Estado, en el solar que ocupaba se alzaron nuevos edificios de viviendas burguesas que forman un espléndido conjunto de arquitectura urbana de finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Destaca el edificio del actual Parlament de las Islas Baleares, construido como sede social del antiguo Círculo Mallorquín, que contiene algunos salones de gran magnificencia; entre ellos, el de fiestas, ahora sala de sesiones del Parlament.
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